Reve Altorricón 4 – San José 1 (J32), la crónica de Ó. Miranda

Reve Altorricón, 4
San José, 1

Reve Altorricón: Maestro, Eufemio, Manel (Camarasa, minuto 70), Palau (Cortés, minuto 52), Cierco, Paco Márquez (Marc, minuto 75), Ezquerra (Valerio, minuto 58), Bría, Marko, Ribera y David Márquez.

San José: Israel, Edu, Ramón (Joel, minuto 62), Nacho, Sierra, Eli, Pascal, Juan Carlos, David, Carlos Parrón y Javi Hoz.

Árbitro: Sr. Alexandro. Expulsó al local Maestro con roja directa en el minuto 58. Amonestó a los locales Manel, Palau, Marko y David Márquez; y a los visitantes Nacho y Javi Hoz.

Goles: 1-0, minuto 25: Ribera. 2-0, minuto 48: Marko. 3-0, minuto 50: Eufemio. 3-1, minuto 59: Eli de penalti. 4-1, minuto 70: Marko.

Nada que contar hasta el minuto 25. Casi media hora. Justo el mismo tiempo que se retrasaron árbitro y asistentes en llegar al Campo Municipal de los Deportes. El desconcierto arbitral no sólo tuvo lugar en las carreteras oscenses sino también en el terreno altorriconense. Finalmente, sus errores no influyeron en el resultado, pero propiciaron un cierto ambiente de nerviosismo impropio de un partido donde se jugaba más bien poco.

Minuto 25. Un centro de Cierco desde la izquierda encontró en el segundo palo la bota del capitán y goleador altorriconense. Ribera abrió el marcador y acercó a su equipo a la victoria, un mes después del último triunfo.

Tras el descanso, lo que parecía el finiquito del partido. Dos goles en dos minutos. Marko al rematar un centro de David Márquez; y Eufemio (o la cabeza de algún defensa del San José) tras un saque de falta de Ezquerra llevaron el tres a cero al marcador. Todo parecía tranquilo. Los tres puntos tenían dueño y la pólvora visitante parecía estar demasiado mojada para explotar. Sin embargo, un claro penalti de Maestro, que hasta el momento había hecho un gran partido, llevó al meta local a los vestuarios antes de tiempo, a su equipo a jugar con diez y a Eli al punto de penalti. El San José no falló. 3 a 1. Nervios, entradas duras y polémicas decisiones arbitrales. Pero Marko decidió acabar con todo aquello por la vía rápida. Su doblete significó la tranquilidad definitiva tras una gran jugada que comenzó en los pies de Camarasa, pasó por los de David Márquez y terminó con la definición del joven jugador altorriconense.

Óliver Miranda