Reve Altorricón 2 – Lalueza 4 (J12), la crónica de Enrique Ribera

Se acabó la racha en el partido mas increíble del mundo

Tras ocho jornadas sin perder, ayer, en un partido extrañísimo, el Reve Altorricón encajó una derrota más clara en el marcador que lo que realmente se vio en el campo. En mi opinión el único equipo que hizo cosas buenas y malas fue el Altorricón y la derrota es únicamente responsabilidad nuestra.

No es normal que fallemos tanto ante la portería visitante y no es normal que demos tantas facilidades para encajar dos goles tan tontos. Al descanso se llegó con cero a dos, cuando, al menos, deberíamos haber marcado un gol y si la efectividad hubiera sido la misma que la visitante el marcador hubiese sido de seis a dos. Pero esto es fútbol y con dos buenos balones largos y nuestro equipo descolocado por estar volcados en el área visitante, un inexplicable cero a dos que nos dejaba con una cara de incredulidad tremenda.

En la segunda parte más de lo mismo. Aluvión de llegadas y ocasiones locales, bien defendidas o neutralizadas por la defensa y el portero, y otro balón largo desde el centro del campo, esta vez de cabeza, habilita el tercer tanto visitante. Alucinante. Lo nunca visto estaba sucediendo, no hacíamos mal partido y estábamos siendo superiores en todo menos en el marcador, pero nuestras propios errores en todas las líneas nos estaban condenando. Hablando de errores, antes del cero a tres marcamos el uno a dos pero nos lo anularon, no se cuantos fueras de juego nos pitaron a nosotros y sí sé los que les señalaron a ellos, ninguno.

Reducimos distancias con el uno a tres; y el dos tres llegó a falta de cinco minutos. Ellos estaban con diez y fundidos pero ayer era nuestro día de la mala suerte y estaba escrito que no tocaba conseguir nada positivo, habíamos gozado en muchos partidos anteriores de muy buena suerte en momentos puntuales y ayer carecimos de ella. Para colmo, del posible empate pasamos al tres al cuarto suyo.

No quito meritos al trabajo del equipo monegrino, hicieron su partido y encontraron su premio gracias a las tremendas facilidades que les dimos. Perdimos la seguridad defensiva por completo y a contracorriente aún dimos más facilidades atrás y en vez de reducir distancias a cada jugada éstas aumentaban.

Felicitar a todos mis compañeros por el esfuerzo sin recompensa de ayer, creo que fuimos superiores en el juego y en oportunidades pero lo que manda son los resultados. Enhorabuena al Lalueza, otros días como en Alcampell les salió todo mal a ellos y encajaron siete, esto es fútbol y días así pueden suceder.

Esto sólo es una anécdota en nuestra marcha ligera, tenemos un buen colchón de puntos, seguimos arriba con los mejores y el domingo tenemos oportunidad de resarcirnos. Sólo hace falta aprender de los errores.

¡Ánimo verdes, un accidente lo tiene cualquiera!

Enrique Ribera