Reve Altorricón 1 – Almudévar 1 (J8), la crónica de Enrique Ribera
Empate que nos deja mal sabor de boca
El último partido en casa contra el Fuentes hacía referencia al último pase que nos habilitó para ganar el partido, pues bien, ayer tuvimos cuarenta últimos pases para habernos llevado el partido y todos se perdieron.
Partido raro el de ayer. Nuestro rival no jugó a nada más que a defenderse durante los noventa minutos y a defender primero el resultado inicial y luego su gol. A nosotros nos costó más de lo normal entrar en el partido y cuando empezamos a trenzar necesitábamos dos goles para ganar el partido y teníamos al equipo contrario plantado al borde de su área.
Desde un principio se notó que no era nuestro día, tuvimos cantidad de llegadas, saques de esquina, centros al área pero fallamos mucho en el chute, el pase o el remate final. Además no tenemos la seguridad defensiva de otros partidos y balonazos sin sentido o saques de banda nos crean numerosas dudas para sacar el balón de nuestra área.
Con todo lo expuesto se entiende el resultado final, un empate que es a lo que venía el Almudévar. A empatar. Y casi se llevaron el partido, aunque no hubiese sido justo. Tampoco hubiese sido justo que hubiésemos ganado nosotros por el juego que demostramos, pero sí por la ambición y las ganas, ya que quisimos conseguir un resultado positivo más que ellos, y sólo por eso merecíamos el triunfo.
Es demasiado pronto para ir necesitados de puntos pero estos partidos son de los que desesperan por el pésimo espectáculo que se vio y el conformismo en el resultado, todos con miedo a perder en los últimos minutos, el descaro de ir por el partido fue nuestro pero no era el día.
Seguimos sin perder y en la zona noble de la tabla y ahora sin tiempo a reflexionar, el jueves tenemos un hueso en un equipo duro y trabajador que ha hecho un formidable inicio de temporada, la Peña Ferranca de Barbastro.
Son muchas las temporadas que los dos equipos llevamos en Preferente y en Primera Regional y que yo recuerde jamás nos hemos enfrentado entre si, por las curiosidades de cruzarse en ascensos y descensos, así que un aliciente más para afrontar con muchísimas ganas el choque.
Esto es muy largo y hay que ser constantes en los esfuerzos, tendremos más partidos buenos o regulares pero con empeño y constancia sacaremos el juego y los resultados, al igual que no nos afecta para nada cuando encajamos un gol en un partido porque creemos en nuestras posibilidades de remontarlo; este empate va a ser anecdótico si jugamos un buen partido en Barbastro el jueves.
¡Pasamos página y a por el siguiente rival!
Enrique Ribera