Altorricón 0 – Oliver 2 (J8), por Enrique Ribera

Una vez más ‘saboreamos’ la derrota

Podemos tirar de todos los tópicos que se quiera, pero la realidad es que no conseguimos ganar de ninguna de las maneras. El equipo, una vez más, se dejó la piel en el campo y lo dio todo para que llegara la victoria, pero de nuevo no vimos portería y en el primer chute a puerta que recibimos, pasada la media hora de la segunda parte, encajamos gol y nos tocó saborear de nuevo la derrota más injusta de la temporada.

No mereció nada el Oliver, ni un punto ni mucho menos los tres, a tenor de lo visto en el terreno de juego, pero no es ni mucho menos culpa suya que no sepamos materializar las numerosas y claras ocasiones de gol que tuvimos a lo largo del partido. Dominamos de cabo a rabo y tan solo fueron superiores con el cero a dos cuando ya estábamos entregados y resignados.

Lo hicimos todo bien, fuimos superiores en todo, fútbol, fuerza, entrega, garra… en todo menos en el marcador. Fuimos mejores, pero lo que cuenta al final del partido son los goles, ellos metieron y nosotros no. Fácil de explicar, difícil de creer, pero todo el mundo que estuvo presente en el municipal sabe de lo que estoy hablando. Ver para creer.

El vestuario estaba jodido al terminar el partido, una mezcla de incredulidad y resignación y es que todo nos sale del revés. Detalles de fueras de juego, rebotes, rechaces… todos nos dan la espalda y favorecen a nuestros rivales.

Pero toca seguir hacia delante, este equipo es muy fuerte de cabeza, mucho más de lo que se piensa todo el mundo y no nos damos por muertos hasta que no quede ninguna esperanza de salvación. Sabemos que las victorias van a llegar y confiamos en la igualdad de la liga para demostrar que ganando a cualquier rival podemos tener opciones de salvación hasta el final.

Ayer el vestuario reaccionó de maravilla a la derrota y a los pocos minutos ya estábamos pensando en el próximo partido ante el Andorra. Nos lo tomamos con humor porque lo de ayer ya es cómico y solo hace que incrementar nuestra hambre de victoria. Cuando llegue la primera el equipo estará preparado para salvarse porque los malos momentos ya los habremos superado, no como otros equipos que están más arriba en la tabla.

Confío mucho en nuestro trabajo y el fútbol no es tan injusto, el que hace las cosas bien, trabaja y no se da por vencido, termina encontrando la recompensa.

¡Todo llegará verdes, hay que seguir en la brecha!

Enrique Ribera

Espacio patrocinado por Centre Can Rosselló