Pomar 2 – Altorricón 2 (J9), la crónica de Enrique Ribera

Bonito entretenimiento que volvió a acabar en tablas

De nuevo un empate que pudo ser victoria, opinarán los más optimistas, o derrota, dirán los más pesimistas. Para mí fue justo. Al fin y al cabo se nos puso muy mal al principio, supimos reaccionar durante todo el partido con juego y ocasiones para ganar, pero en el tramo final también lo pudimos perder por una imprudencia.
El fútbol vive de errores del rival que se aprovechan para marcar diferencias. Ayer las ocasiones que le concedimos al Pomar para ganar el partido fueron muchas. Pirla marca un gran gol desde la frontal pero el regalito en modo de pase atrás de nuestra defensa es de alevines. Acto seguido otra imprudencia dentro del área regala el segundo, de penalti. La historia de Giner Torrero revoloteaba de nuevo en nuestras cabezas, nada más empezar y el equipo contrario se encontraba con todo de cara y con nuestros regalos.

Pero las sensaciones eran distintas, el equipo creía en sus posibilidades y rebosaba confianza, poco a poco entramos en el partido y ayudados por otra imprudencia, esta vez de Abraham, cambió radicalmente el panorama con el gol y su expulsión. Al descanso ya habíamos fallado dos claras ocasiones en la cabeza de Gerard y las botas de Ribera para haber igualado el partido, pero quedaba un mundo y el partido se nos había puesto de cara, teníamos superioridad numérica y empezamos a dar buen trato a la pelota.

En la segunda parte movimos ficha, volvimos al sistema habitual y nos hicimos lógicamente con la manija del partido. Conseguimos el empate en un corner, con todavía media hora de partido por delante. El Pomar tiró de orgullo para seguir intentándolo pero apenas creó peligro hasta el descuento. Nosotros, con las fuerzas ya escasas arriba, movimos el banquillo en busca de los tres puntos y a tenor de lo visto estuvieron muy cerca de caer. Fallamos dos ocasiones clarísimas en las botas de Miguel y en la cabeza de Dani, la efectividad sigue siendo nuestro punto débil. Al igual que la semana pasada ante el Valdefierro desaprovechamos oportunidades para sumar cuatro puntos más. La cosa cambia desde otro punto de vista, la del espectador local, la expulsión de Maestro nos pudo salir muy cara si el tiro posterior coge puerta. Un Panadero testimonial hubiese sido un espectador de lujo de la victoria mediocinqueña.

Final y todos descontentos, aunque mañana seguro que con más calma los dos equipos verán el punto de otra forma, pensando que pudo ser peor. Lo positivo fue que disfrutamos de un buen derbi en Tercera, un derbi entre los pobres de la categoría pero que no tienen nada que envidiar a los demás equipos. El partido estuvo entretenido, con ambiente y deportividad, de dos equipos con almas gemelas.

Y continuamos como los de Alicante, para delante. La semana que viene volvemos al Municipal con los tres puntos en el punto de mira y de momento con la liga de la permanencia librada. Vamos a continuar con la misma constancia y trabajando duro para sacar punto tras punto.

El domingo va haber un gran ambiente en el campo y debemos luchar a muerte por los tres puntos, algo que sabemos no va a ser nada fácil.

¡Seguimos en la brecha, vamos a por el Tarazona!

Enrique Ribera