Robres 2 – Altorricón 2 (J20), la crónica de Enrique Ribera
Empate entre dos buenos equipos y un árbitro lamentable
Si bueno fue el partido del sábado entre monegrinos y literanos, mejor lo hubiera sido con un árbitro en condiciones. El que cobró el sábado sólo vino a eso y al igual que en Caspe el fatídico día del cabezazo de Pablo, dejó transcurrir los acontecimientos sin decir ni hacer nada. Normal que se montará la que se monto al finalizar el partido, no hubo autoridad, permitió demasiado, insultos y golpes por parte de todos y acabó en tangana y menos mal que en unos y otros siempre hay alguno con conocimiento. En definitiva, vergonzoso lo del señor colegiado.
En lo futbolístico: dos partidos en uno, una parte para cada equipo. Primera mitad muy buena del Altorricón, bien posicionados, con el balón controlado, llegando bien por abajo al área rival y sin pasar apenas apuros defensivos. Todo el equipo trabajo, corrió y quiso la pelota. Al descanso victoria cómoda por 0 a 1 y con buenas sensaciones.
En la reanudación fue otro cantar. Nos sacaron del campo. Nos cagamos sobre el césped y más por méritos suyos que por deméritos nuestros nos voltearon el partido en un ‘plis plas’. Fueron los peores minutos sobre el césped de San Blas, nos escondimos y nos arrollaron con cierta permisividad del de negro que se tragó el pitó y se olvidó las tarjetas. Con el 2 a 1 en el marcador se acabó el juego y empezaron las tanganas, las protestas, las patadas… Partido de hombres diría alguno, pero lo cierto es que no se jugó nada y se permitió demasiado. Su entrenador insultó a todos los presentes de Altorricón, y lo hizo en repetidas ocasiones, hasta que Félix estalló y decir lo que todos pensábamos le costó irse a la caseta. Sobre el campo ya no se jugó más en los últimos 20 minutos y el Robres perdonó con el tercero en varias ocasiones. Al final una falta lateral desde la derecha se la metieron en su portería para empatar a dos y a la jugada siguiente sacaron bajo palos el 2 a 3 de Isma que hubiese sido demasiado premio, pero que hubiésemos celebrado como posesos.
No debimos puntuar el sábado, pero lo que unas semanas te quita el fútbol otras te lo da y el sábado nos tocó la de cal. Hemos de reflexionar y mucho en los diez minutos que nos fuimos del campo. Por agallas y agresividad no nos puede ganar nadie, y debemos reaccionar rápido en esos minutos, juntar líneas y apretar los dientes en momentos así. Debemos aprender la lección para campos como el de Pomar, Binéfar o Grañén… próximos desplazamientos fuera.
Y la tabla sigue igual, distinto orden pero mínimas diferencias entre los cuatro de arriba, a por el próximo y a ganar. El sábado y en casa un equipo duro rocoso y en forma como es el Fuentes. Bonitos partido con nuestros colegas zaragozanos, con dos estilos distintos pero eficaces.
Vamos a seguir luchando. ¡Aúpa verdes!
Enrique Ribera