Altorricón 1 – Robres 0 (J9), la crónica de Enrique Ribera

¡Nervios e igualdad pero tres puntos más para la saca!

Al final de liga nadie se acordará del partido de ayer ante el Robres, no pasará a la historia por el juego, por la emoción o por el resultado. Sólo por los tres puntos más que aumentan el volumen del saco y nos alargan la racha a nueve partidos sin perder.

Sabíamos que iba a ser un choque duro con mucha intensidad e igualado en muchas fases del partido. Así fue. Con noventa minutos muy igualados en el juego, al final nos llevamos la victoria por pequeños detalles, pequeños detalles que marcan las diferencias.

Empezó el partido como habíamos previsto, mucha igualdad e intensidad en todo el campo. Ellos se volvieron locos para ajustar las marcas de nuestros delanteros, su pivote defensivo y sus cuatro defensas no supieron en todo el partido como jugaban los tres hombres de arriba del Altorricón y no se incorporaron al ataque hasta que fueron por detrás en el marcador. La clave, una vez más, en el centro del campo. Costó hacernos con él, pero cuando lo conseguíamos salíamos con mucho peligro y de estar más acertados en ataque durante los noventa minutos el resultado hubiese sido más abultado. Y de nuevo por cuarta semana consecutiva la portería a cero. Esto no es casualidad, es fruto del sacrificio de los once jugadores del equipo ya que todos se aplican al máximo en tareas defensivas. Por supuesto que los porteros y la línea de cuatro tiene gran protagonismo, pero tanto en jugada como a pelota parada todo el equipo da el máximo y además nos está acompañando la suerte.

La segunda parte cambió el panorama del partido. Nos pusimos por delante con un libre directo de Alberto Blanch, que hizo una parábola magnifica con la cabeza de uno de la barrera, y luego toco sufrir. Cedimos el peso del partido esperando matarlo con el segundo que nunca llegó, y no será porque no tuvimos oportunidades. El Robres, como buen equipo de la categoría, luchó con todas sus fuerzas para lograr el empate, pero no tuvo suerte y se encontró con un equipo que esta temporada si se esta acostumbrando a sufrir y a los partidos ajustados.

Al final lo que cuenta es el resultado, y éste, aunque corto, era favorable al equipo local. Quizás no fuera el más justo, viendo el esfuerzo de ambos equipos, pero muchas veces este juego no siempre es justo.

Salimos de un partido apasionante y nos vamos a otro, esta vez en Pomar, al que precedemos en la clasificación. Nueve jornadas de liga y esto sigue igual, nadie se marcha del resto, pero cada vez se estira más la tabla. De un punto que tiene el La Fueva a los veinte del Universidad, dieciocho equipos desparramados sin apenas una brecha de más de dos puntos.

¡Enhorabuena a todos los verdes y vamos a seguir así!

Enrique Ribera