Pueyo 2 – Altorricón 3 (J15), la crónica de Ignacio Ramos

Pueyo, 2
Altorricón, 3

Pueyo: Carruesco, Latre, Román, Millera, Pons, Godia, Biels, Conde, Mateo, Ferrer y Uclés. También jugaron Zaragoza y Alfonso.

Altorricón: Costa, Llasera, Alós, Sissoko, Monforte, Luque, Joan, Zamora, Ibarguen, Sabater y Rabhi. También jugaron Rubio, Carrasquet y Estrada.

Árbitro. Capapé.

Goles: 1-0 Minuto 46: Ferrer. 2-0 Minuto 73: Zaragoza. 2-1 Minuto 84: Joan. 2-2 Minuto 90: Ibarguen. 2-3 Minuto 93 Rubio.

En el minuto 83 el Altorricón perdía 2 a 0 en Pueyo de Santa Cruz. El partido que habían jugado los altorriconenses hasta entonces, poco después de recibir el segundo tanto local, había sido más que horroroso o, simplemente, malo. Entonces Joan plantó el esférico en el borde del área. El colegiado había señalado un golpe franco. El balón voló hacia el palo izquierdo de Samuel que no pudo evitar el 2 a 1.

Los hombres entrenados por Román Panadero habían comenzado a reaccionar tras el tanto de Zaragoza en el 73, tras un falló defensivo que terminó con una magistral vaselina del jugador local que superó a Pere Costa. Antes, justo al inicio de la segunda mitad, Gonzalo había abierto el marcador. De los primeros 45 minutos poco bueno a comentar, sin mucha intensidad y con menos ocasiones de gol.

En el minuto 90 Latre derribó a Juan Carlos al borde del área. Capape Latre lo envió a la caseta por doble amonestación. Monforte ejecutó la falta, Samuel la rechazó y Julen, que apenas contaba unos minutos sobre el terreno de juego, remató el balón al fondo de la red. Empate. Pero el Altorricón quería más. En cierta manera, no le queda otro destino si su objetivo, único e irrenunciable, es el ascenso. En el 93 Juan Carlos volvió ser derribado en las cercanías del área local. Joan, como hiciera diez minutos antes, tomó el balón. Esta vez no anduvo tan acertado porque el meta del Pueyo consiguió despejar su disparo; sin embargo, apareció Juan Carlos para recoger el rechace y marcar el definitivo 2 a 3. Final vibrante, apoteósico…, dramático y feliz a partes iguales porque el fútbol tiene estas cosas, extrema los sentimientos, más aún cuando los acontecimientos son tan impredecibles.

A pesar de la victoria, no se puede olvidar lo mucho que le queda por mejorar al Altorricón para afianzar sus aspiraciones de ascenso a Preferente. Destacar la entrega de los altorriconenses durante los últimos minutos, entrega que tuvo premio, pero el equipo debe competir durante los 90 minutos; no siempre los finales son tan felices como el de hoy.

Ignacio Ramos