«Mi triste aventura con ALOSA AUTOCARES Y AUTOBUSES, S.L. (ALARSA)», por Óliver Miranda (1ª parte)

Autobús Alarsa

¿Por qué responsabilicé ayer a ALOSA AUTOCARES Y AUTOBUSES, S.L. de retrasar la publicación de la crónica?

Sábado 5 de diciembre. 18:20 horas. Acabo de llegar a la parada de autobuses de Almacelles. Espero el coche de la línea regular Huesca – Barcelona que tiene prevista su llegada a las 18:25 (según el billete electrónico que sostengo en mi mano izquierda).

A las 18:45 todavía no hay ni rastro del autobús. Decido llamar al teléfono que aparece al final de mi billete: 93 491 10 10. Al otro lado no responde nadie de ALOSA AUTOCARES Y AUTOBUSES, S.L. (ALARSA, la empresa que gestiona la línea Huesca – Barcelona a la que le compré el billete hace unas horas), sino una responsable de la compañía Vibasa. Amablemente me facilita el teléfono de ALOSA (902210700). Realizo tres llamadas entre las 18:47 y las 18:55. No hay respuesta. Han pasado treinta minutos desde la hora prevista en la que tenía que partir de Almacelles y no sé qué ha ocurrido. Puede que el autobús haya adelantado su salida o que tenga algún problema mecánico. Pienso en distintas posibilidades pero no puedo confirmar ninguna. Lo único cierto es que debo llegar a Barcelona antes de las 21:30.

De camino a Lleida

Sin noticias de ALOSA la decisión está tomada. Iré a Lleida para coger el próximo tren que me lleva a la capital catalana.

Son las 19:58. Sentado en la plaza 14A del coche 3 del Alvia 00641 emprendo un viaje de 72 minutos hacia la ciudad condal.

8,45 euros de un billete que no pude utilizar + 27,65 euros de un Alvia que tuve la obligación de comprar para llegar a mi destino a la hora en la que había previsto según el horario de la línea Huesca – Barcelona de ALOSA… el dinero es importante, lo es, sería absurdo pensar que las casi 5.000 pesetas del tren no son un problema, lo son, pero lo más grave es la sensación de abandono que sentí ayer tarde en la parada de Almacelles. Abandonado a mi suerte.

Estoy decidido a luchar por una explicación que alguien debió darme, al tiempo que batallaré del mismo modo para recuperar el dinero invertido y para que esta desagradable historia sea conocida por el mayor número de personas posible.

¡Ah! Ya en el tren, algo más tranquilo, pude escribir la crónica, eran las 20:30. Había prometido enviarla a las 19:30 porque tenía intención de redactarla en un autobús, no es un vagón de tren.

Aclaración para los que se pregunten por qué volví un sábado por la tarde a Barcelona, habiendo llegado a Altorricón ese mismo día por la mañana. Respuesta: trabajo el fin de semana. Hace algún tiempo ya escribí sobre ello, sobre mis sábados (o domingos) ‘non stop’. Si alguien no lo leyó o quiere recordarlo aquí dejo el enlace.

Óliver Miranda

«Mi triste aventura con ALOSA AUTOCARES Y AUTOBUSES, S.L. (ALARSA)», por Óliver Miranda (2ª parte)

«Mi triste aventura con ALOSA AUTOCARES Y AUTOBUSES, S.L. (ALARSA)», por Óliver Miranda (3ª parte)

5 Respuestas

  1. Oscense dice:

    ¡Qué nos vas a contar de ALOSA…! ¡Viva el monopolio!

  2. Óliver dice:

    Lo sé, no es la primera vez.
    En cualquier caso, estoy decidido a hacer algo de ruido, a luchar para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir.

  3. MABE dice:

    NO ME EXTRAÑA LO QUE TE OCURRIO

    YO HOY QUIEROM UN BILLETE Y NO TIENEN LA PAGINA CONECTADA, O ESTÁ INDISPUESTA????????????????????????

    ESTOY CONTIGO, SALUDOS

  4. ROSA dice:

    hola, pues yo estoy buscando trabajo en alosa…..
    que me recomendais???
    llevo un año parada¡¡¡

  5. Observatore dice:

    Un año parada? No hay otra recomendación posible, busca trabajo allá donde lo haya. Llama a Alosa a ver que te cuentan.